noviembre 13, 2012

Asamblea Extraordinaria ICOMOS Chile




El Comité Chileno del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios cita a sus miembros a una Asamblea Extraordinaria para el día jueves 15 de noviembre, con el objeto de desarrollar el tema “Comités Científicos de ICOMOS: Misión y Proyecciones”.

La instancia, a desarrollarse en el Auditorio de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad de Chile, tendrá el siguiente programa:

17:30 – 17:40 hrs.
Bienvenida Antonio Sahady V. Director Instituto de Historia y Patrimonio, Facultad de
Arquitectura y Urbanismo, Universidad de Chile.

17:45 - 18:00 hrs.
Relevancia de los comités científicos en la labor de ICOMOS. José de Nordenflycht C.

18:05 – 19:15 hrs.
Breve presentación representantes de ICOMOS Chile a Comités Científicos Internacionales de ICOMOS 

•Edwin Binda C. arquitecto, miembro Comité Internacional Itinerarios Culturales (CIIC).

•Marcela Hurtado S., arquitecto, miembro Comité Internacional de Análisis y Restauración de Estructuras del Patrimonio Arquitectónico (ISCARSAH).

•Ángel Cabeza M., arqueólogo, miembro Comité Internacional de Patrimonio Cultural
Intangible (ICICH).

•Mónica Bahamondez P., Especialista en Conservación Preventiva, miembro Comité
Internacional de Patrimonio Arquitectónico en Tierra (ISCEAH).


19:20 – 19:45 hrs.

Consultas asistentes.


Contacto:
Mario Ferrada - 9-7990415

noviembre 09, 2012

Responsabilidad del Bien Común: un futuro para el patrimonio



“Indignarse no basta.”, con esa sentencia comienza el último libro de Salvatore Settis, el que con el elocuente título de Azione popolare. Cittadini per il bene comune (Einaudi, 2012), comienza justo donde quedaban las propuestas de su anterior libro Paesaggio, Costituzione, Cemento. La battaglia per l’ambiente contro il degrado civile (Einaudi, 2010).

Desde los contenidos que anuncian esos títulos,  para cualquier lector desprevenido Settis podría ser un activista que habla desde el frenesí atribulado de la acción directa sobre la esfera pública.

Lo curioso es que de alguna extraña y  prejuiciosa manera al conocerlo en persona no nos calza esa superficial lectura con este juicioso y pausado profesor que, desde el rigor y la contención académica ha recorrido el largo camino de la arqueología y la historia del arte hasta el patrimonio. Y viceversa.

Es sabido que Italia –su paisaje de origen- concentra una gran cantidad de bienes culturales y valores ambientales que lejos de ser la mitad de todo el Patrimonio Mundial –como el muy bien desmitifica en algún pasaje de sus libros- es lo suficientemente abundante y relevante como para imaginar que desde su niñez el futuro arqueólogo e historiador del arte tenía un horizonte de expectación tan profundo como abierto, tal cual como confiesa en una entrevista a Umberto Allemandi.

Nacido en Rosarno -en 1941- ha tenido importantes responsabilidades directivas en Italia (Diretore de la Scuola Normale Superiore de Pisa) y EEUU (Getty Center for the History of Art and the Humanities), así como de reconocimiento disciplinar en España (Cátedra Museo del Prado), Alemania , Francia (Consejo Científico del Museo del Louvre) entre otros innumerables episodios de una biografía intelectual que se despliega más allá de una simple enumeración curricular.

Sin embargo más allá de su impecable y destacado cursus honorum científico y académico, será la impertinencia de quien extiende su palabra hacia lo público lo que nos ha tenido más admirados a quienes desde la distancia nos reconocemos en la complicidad disciplinar, en un gremio abundante y de larga tradición en su país, pero que para nuestro medio local es escaso y a ratos invisible.

Tal vez desde Giulio Carlo Argan que Italia no nos entregaba un historiador del arte tan comprometido con la esfera pública.  Un historiador del arte que más allá de la estética se compromete con la ética de una disciplina que no podría tener otro fundamento que la sostenibilidad de sus objetos de estudios devenidos patrimonio en tanto bien común.

Como disciplina que investiga sobre los testimonios de una voluntad preexistente por producir lo que hoy podemos designar como arte, no deberíamos estar ajenos al destino posible de nuestros objetos de estudio.
Y es desde ese lugar en que sus textos representan la convergencia de dos líneas temáticas que no son tan paralelas como pudiera pensarse. La primera en referencia al estudio del arte clásico y moderno italiano y la segunda en torno a la problemática del patrimonio. Hasta la fecha traducidos al español entre lo primero hemos podido leer La “Tempestad” interpretada (Akal, 1990/Einaudi 1978), El Futuro de lo Clásico (Abada, 2006/Einaudi 2004) y Warburg Continuatus. Descripción de una biblioteca (La Central, 2010). Mientras que de lo segundo solo conocemos las ediciones originales en italiano, entre las que destacan –a parte de los ya mencionados- Italia S.p.A. L’assalto al patrimonio culturale (Einaudi, 2002) y Battaglie senza eroi. I beni culturali tra istituzioni e profitto (Electa, 2005).

Probablemente Salvatore Settis representa en estos últimos textos algunos valores escasos por nuestros días en esta parte del mundo. Una dignidad académica que, lejos de la arrogancia pseudo intelectual, tiene el arrojo de poner al servicio de la comunidad sus capacidades en beneficio de un bien común como es el derecho a poner en valor el pasado en línea con un futuro posible para las generaciones que asoman.





Texto leído como introducción al diálogo entre el Historiador del Arte Salvatore Settis y José de Nordenflycht, Presidente de ICOMOS Chile, Festival Puerto de Ideas, Valparaíso 9 de noviembre de 2012.

octubre 27, 2012

Diálogos sobre Patrimonio


Durante el martes 30 y el miércoles 31 de octubre se llevará a cabo el encuentro internacional “Diálogos sobre Patrimonio” en la Biblioteca de Santiago. Este evento es organizado por el Consejo de Monumentos Nacionales (CMN) en colaboración con la Dirección de Bibliotecas, Archivos y Museos (DIBAM) y la Dirección de Asuntos Culturales (DIRAC) del Ministerio de Relaciones Exteriores.

Dicho encuentro se abocará a la discusión sobre la gestión, protección y desafíos en el ámbito del patrimonio cultural y natural a nivel nacional, regional e internacional. El objetivo de esta instancia es generar un espacio de reflexión y debate desde una mirada interdisciplinaria sobre las buenas prácticas en relación al patrimonio en el ámbito público, académico y privado.


Invitados:


Dra. Ruth Shady, arqueóloga y antropóloga, Jefa Proyecto Especial Arqueológico Caral-Supe, Ministerio de Cultura del Perú.


Dr. Wolfgang Stinnesbeck, paleontólogo de invertebrados, docente de la Universidad de Heidelberg de Alemania.


Smiljan Radic, arquitecto de la Pontificia Universidad Católica de Chile.


Fernando Carrión, arquitecto y urbanista, Docente del Programa de Estudios de la Ciudad de FLACSO Ecuador y Presidente de la Organización Latinoamericana y del Caribe de Centros Históricos.


Dr. Marcelo Leppe, paleobiólogo, Jefe Departamento de Ciencias del Instituto Antártico Chileno (INACH).


Rodrigo Pérez de Arce, arquitecto y docente de la Pontificia Universidad Católica de Chile.


José de Nordenflycht, historiador del arte, Presidente de ICOMOS Chile.


El encuentro será gratuito y estará abierto al público previa inscripción. Se realizará en la Biblioteca de Santiago (Matucana #151, metro Quinta Normal), entre las 9:00 y las 18:00 horas.

Mas informacion en www.monumentos.cl

octubre 02, 2012

I Encuentro de Estudiantes sobre Patrimonio




El "Primer Encuentro de Estudiantes sobre Patrimonio Cultural. Diálogos entre teoría y práctica",  se realizará los días 3 y 4 de octubre entre 10:00 y 17:00 horas, en la Sala de Profesores de la Facultad de Historia, Geografía y Ciencia Política, de la Pontificia Universidad Católica de Chile, ubicada en Av. Vicuña Mackenna 4860, Macul, Santiago de Chile.

Esta actividad, organizada por la profesora Daniela Serra, busca generar un espacio de debate en el cual los estudiantes puedan intercambiar ideas, reflexiones y propuestas sobre la problemática actual del patrimonio cultural en Chile.

A modo de cierre el día jueves 4 de octubre a las 16:00 José de Nordenflycht, Presidente del Comité Chileno del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios ICOMOS  dictará la conferencia:"Patrimonio Mundial: evolución de un concepto a 40 años de la Convención Unesco"



El programa completo puede ser descargado en el link: 
http://historia.uc.cl/images/stories/seminario/programa_patrimonio_oficial.pdf


septiembre 30, 2012

Concurso Palacio Pereira


El concurso internacional de arquitectura para determinar el anteproyecto que recuperará el Palacio Pereira ha sido convocado por el Ministerio de Obras Públicas y la Dirección de Bibliotecas Archivos y Museos. En este contexto -y de manera inédita en nuestro país- el Presidente de ICOMOS Chile participará como asesor, con el objetivo de aportar los criterios doctrinarios y principios teóricos que permitan tomar una decisión sobre la intervención patrimonial que finalmente sea seleccionada por el jurado.

En una nota de prensa publicada hoy en el diario El Mercurio la arquitecta Magdalena Krebs, directora de la Dirección de Bibliotecas, Archivos y Museos comenta que: "El Palacio Pereira es el ejemplo más emblemático del conflicto que históricamente ha existido en Chile entre el interés del Estado por proteger su patrimonio y el derecho de propiedad sobre un bien privado. Fue un verdadero drama que se estuvo arrastrando 30 años sin solución." agregando que  "Vamos a respetar la tipología y volumetría del palacio, por lo cual el nuevo edificio no podrá superar su altura original. La restauración del edificio histórico implica recuperar la fachada y el crucero central de la forma más fiel posible a los originales. En los demás recintos interiores, se deberá mantener la espacialidad y la riqueza de su materialidad", explica Krebs. Dice además que la nueva construcción "debe pertenecer a la mejor arquitectura del siglo XXI, y hacer un contrapunto con el edificio del siglo XIX".

La convocatoria del concurso y todos los antecedentes se pueden descargar en el sitio www.concursopalaciopereira.cl


septiembre 20, 2012

Presentación libro de Max Aguirre



El Decano de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo, de la Universidad de Chile, Prof. Leopoldo Prat Vargas, invita a toda la comunidad a la presentación del libro "La Arquitectura moderna en Chile (1907-1942). Revistas de Arquitectura y estrategia gremial", del Arquitecto Dr. Max Aguirre González, que se realizará el jueves 27 de septiembre, a las 12:30 hrs., en el Hall Central de la FAU.


La presentación estará a cargo de la Vicerrectora de Extensión y Comunicaciones de la Universidad de Chile, antropóloga, Sonia Montecino Aguirre; el Presidente de ICOMOS Chile, historiador del arte, José de Nordenflycht Concha; y el Vicedecano de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo, de la Universidad de Chile, Prof. Humberto Eliash Díaz.

septiembre 17, 2012

La Respuesta

Estimado Don Germán:

En primer lugar le agradezco que Ud. sin conocerme “de nada” y sin saber “por qué contesta” mis comentarios haya dedicado a ello más texto de lo que escribe en el catálogo “Cancha” del Pabellón de Chile en Venecia. Espero que haya podido leer mi carta completa ya que “Plataforma Arquitectura” sólo publicó la primera parte obviando lo referente a los artículos del catálogo, lo que es imprescindible para entender mi opinión de manera adecuada. Puede Ud. consultarla entera en la página del ICOMOS de Chile, http://icomoschile.blogspot.com.es/2012/09/the-cancha.html

Me dice que tiene Ud. la certeza de que el Pabellón es “excelente y se defiende solo” y que “si no pensara así no hubiera participado”. Tiene Ud. suerte de participar nada más que en cosas excelentes, lo que se logra a determinada edad, por la sabiduría o por la simple arrogancia. Los demás mortales habitualmente participamos en cosas que tratamos que sean excelentes y nos preocupamos por ir construyéndolas de esa manera. Personalmente participo en muchas cosas que sin ser excelentes van en búsqueda de ello; eso sí, trato de hacerlas en español y no en inglés.

Cuando no se vive en la excelencia, lo que le sucede a Ud. que reside en lo que Ud. mismo llama una “República Provinciana”, no solamente hay que buscar superar el aislamiento, sino perfeccionar, con los que vivimos situaciones similares, la tarea común de reconstruir nuestra Patria Grande americana.

Si su trabajo es el único que se refiere al término “Cancha” que define la idea del Pabellón y el catálogo, y Ud. lo visualiza como una apertura hacia lo común, no entiendo bien por qué se reducen las manifestaciones andinas a un “Chilean soilscapes” apoderándose de realidades vecinas y buscando un denominador común... en inglés.

Tampoco me explica en su carta por qué transforma las andenerías de cultivo en “Canchas” que conceptualmente son otra cosa, y que por dimensión y función resultarían imposibles de ser usadas como tales. Los andenes de Písac generaban mucho más que flores, ya que alimentaban a buena parte de la población del Valle Sagrado del Cusco y era esa su principal función.

Tengo que agradecerle la precisión de que el témpano que Chile llevó al Pabellón de 1992 no era más que “un montón de cubos de hielo”. Esta visión fragmentaria profundiza aun más la similitud con los cubos de sal que colocan los “Curators” ahora en Venecia.

Don Germán, Ud. interpreta como “artista contemporáneo” a la cancha como “un espacio público cuya utilidad práctica es reflejar el esplendor de una cultura que es capaz de hacer aparecer la belleza haciendo algunas obras por el puro gusto de hacerlas”. Nos advierte de la actual importancia de ello “cuando casi todo el espacio público está privatizado y no hay espacios vacíos de cosas, o sin utilidad práctica, con las que la gente sueñe”. Coincido con Ud., pero tendría que explicarme cómo compatibilizamos esto con el esfuerzo de su catálogo por demostrarnos las posibilidades de las inversiones inmobiliarias en Santiago de Chile, la mención a los éxitos del neoliberalismo, la importancia del índice Standard´s Poors para Chile y todos los otros discursos que llenan las páginas donde no están sus lindas fotografías.

Yo también estoy orgulloso como Ud. de valorar nuestra herencia artística precolombina pero la contemplo en la dimensión de nuestro horizonte cultural americano. No me apropio de ella para reducirla a un territorio inclusivo y por ende excluyente (Chilean Soilscapes), sino para tratar de entenderla como el patrimonio común de chilenos, argentinos, bolivianos, peruanos, ecuatorianos, colombianos y venezolanos. Discrepo con Ud. al considerar que la cultura andina va “desde México a Chile”. Lo andino es andino y ello no significa ningún menosprecio a las culturas de aztecas, mayas y múltiples etnias mesoamericanas. El denominador común vino después de la conquista europea y una de sus herramientas fundamentales, que es expresión de nuestra identidad continental, fue el idioma español, el mismo que se ha soslayado en su catálogo hecho en inglés.

Su arquitectura Don Germán, expresa en muchos casos los valores que hemos reconocido de buscar relaciones con el sitio, el paisaje y las tradiciones. No siempre logran, por razones de privacidad y costo económico, esa amplitud de abrirse a la gente con el espíritu que Ud. propugna del espacio público frente a lo privado. Su reflexión en arquitectura tiene, a mi criterio, poca correlación con los mensajes que otros autores manifiestan en el catálogo y en el Pabellón que Ud. pondera.

Los autores en su discurso oral han manifestado la importancia de la “Competitividad” del Pabellón en Venecia. Nuestra tarea no está en la competencia sino en la solidaridad, que es la forma de construir ese espacio común. No es el Chile “sin límites” sino la América sin límites la que nos une. No es Chile en competencia, ejemplificándose con los íconos de otros países como el Perú, lo que ayuda a entender ese espíritu en común. Por algo es Ud. el único que se centra en la “Cancha” en todo el catálogo.

Neruda vio a Machu Picchu ya construido y parcialmente reconstruido con los ojos del poeta pero no “mejor que nadie”. Con ojos mejores lo vieron las generaciones de las comunidades incaicas que construyeron el lugar. Cuando hoy recorremos cualquiera de los pueblos andinos del Perú verificaremos el sentido de pertenencia de las comunidades de sus obras y el sentido de que “ellos” lo hicieron a través de los siglos. El trabajo solidario de “minga”, que persiste en la región de Chiloé (tan ausente en el Catálogo del Pabellón) es el que los hace sentir partícipes de los rasgos identitarios de culturas seculares.

Puede tener la certeza Don Germán de que quiero ver. Quizás sea causa de un enfoque diferente al suyo porque dependiendo del lugar desde donde se mire nuestra América, el proyecto del territorio común se construirá por el consenso y no por la apropiación competitiva. Mientras tanto Ud., con su arquitectura, seguirá el otro refrán “En tierra de ciegos el tuerto es Rey”.

Un afectuoso saludo de

Arquitecto Ramón Gutiérrez





ICOMOS Chile en su convicción sobre la necesidad de que un diálogo crítico sea leal y transparente a las ideas puestas en circulación, publica íntegramente la respuesta de Ramón Gutiérrez al comentario de Germán del Sol sobre su post del 5 de septiembre en nuestro blog.




septiembre 12, 2012

UTFSM: nuevo Miembro de ICOMOS Chile



En reunión sostenida el pasado 17 de agosto entre el Rector de la Universidad Técnica Federico Santa María Dr. José Rodríguez Pérez y los miembros del Directorio de ICOMOS Chile encabezados por su Presidente José de Nordenflycht, se formalizó la incorporación de la prestigiosa casa de estudios porteña como Miembro Institucional del Comité Chileno del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios.

El Rector Rodríguez ratificó su compromiso institucional con el patrimonio de la ciudad y del país a través de la plena adhesión a los principios que inspira la acción de ICOMOS en todo el mundo, manifestando su respaldo y colaboración a las acciones conjuntas que deriven del interés preexistente entre su comunidad académica y la problemática del patrimonio, en un contexto de vinculación con el medio y responsabilidad social universitaria que tiene como respaldo la alta calificación científica y técnica de la masa crítica académica de su Institución.

Participaron además en esta reunión como parte de la delegación de ICOMOS Chile, los arquitectos Jorge Atria, Vicepresidente, y la Dra. Marcela Hurtado, Secretaria General y además académica del Departamento de Arquitectura de la UTFSM.

Todos los presentes concluyeron en que una agenda de colaboración conjunta será posible en la medida que se activen las relaciones con los Comités Científicos Internacionales de ICOMOS y la acción del conjunto de sus asociados en el país, en la red profesional más importante a nivel internacional para la salvaguardia del patrimonio, que es depositaria de la responsabilidad que le mandata la Unesco a través de la Convención del Patrimonio Mundial, de la acción monitoreo en más de 900 monumentos y sitios en todo el mundo, de los cuales la ciudad de Valparaíso es uno de los más destacados en nuestro territorio nacional.




foto: (de izq. a der.): Jorge Atria, José Rodríguez, Marcela Hurtado y José de Nordenflycht, en Rectoría de la UTFSM, Valparaíso, 17 de agosto 2012.

septiembre 10, 2012

Entrevista Presidente ICOMOS Chile


Los rayadores que acaban de ensañarse con el macizo muro blanco de la casa de José de Nordenflycht en el cerro Yungay de Valparaíso no tienen idea de que marcaron la vivienda del presidente del Comité Chileno del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (Icomos por su sigla en inglés International Council on Monuments and Sites), encargado de velar por los sitios declarados Patrimonio de la Humanidad en representación de la Unesco.Los gruesos trazos negros sobre la nívea superficie recién pintada son una pálida muestra de los problemas y las tareas pendientes de los gobiernos central y locales en materia de protección y conservación de esta ciudad cuyo casco histórico es Patrimonio de la Humanidad desde 2003.Historiador del arte, magíster en Historia con estudios de doctorado en la Universidad de Granada, España, a este docente de la Universidad de Playa Ancha le preocupan profundamente esas tareas inconclusas. Partiendo por la falta de lo que considera la columna vertebral de la gestión patrimonial como agente de desarrollo, que es el plan director.“Debería haber sido prioridad y haberse hecho en el año 1, ya que el documento que sanciona el ingreso de Valparaíso a la Lista del Patrimonio incluye una indicación muy clara: falta un plan director”, plantea. Y sostiene, en entrevista en El Mercurio de Valparaíso, que el Programa de Recuperación y Desarrollo Urbano de Valparaíso (PRDUV) debió haberlo priorizado sobre cualquier otro proyecto de su carpeta.A esa carencia y a la escasa inyección de recursos para la conservación y protección patrimonial atribuye en lo fundamental los problemas, contradicciones y discrepancias que se han venido registrando últimamente en materia de desarrollo urbano del Puerto.

-La Comisión de Cultura de la Cámara aprobó la petición del diputado Joaquín Godoy de invitarlo a explicar los alcances del informe de Icomos que recomendó evaluar el impacto patrimonial que tendría el proyecto Puerto Barón.-

Considero sumamente importante que haya una preocupación de todas las autoridades involucradas en el manejo, no solo de la administración de la ciudad, como el municipio, sino también de todos los órganos concurrentes del nivel central. Porque el integrar la Lista del Patrimonio Mundial convierte a Valparaíso por lejos, pienso yo y piensan los patrimonialistas, en la ciudad más importante de Chile. Entonces me parece excelente, pero también tardío, porque es la primera vez que la Comisión me invita a ir.

-                Tanto la directora de Gestión Patrimonial del municipio como Puerto Valparaíso han señalado que ese proyecto no está en la zona definida como patrimonial por la Unesco. ¿Por qué tendría que tener impacto sobre ella?-

Al inicio del proceso de inscripción de las iglesias de Chiloé en el Sitio del Patrimonio Mundial, en 1997, se envió una información muy precaria de cara a la posibilidad de que fueran afectadas en el futuro por el desarrollo inmobiliario. Y la zona de amortiguación alrededor de la iglesia de Castro es algo así como la vereda y la plaza que está al frente. A dos cuadras yo puedo hacer lo que quiera. Esa es la ley. Pero la Convención ha evolucionado adaptándose a los tiempos y muchos sitios que se inscribieron bajo una normativa han tenido que ser revisados posteriormente.

-¿Y eso es aplicable al caso de Valparaíso?-

Muchas veces he planteado a la encargada técnica y a dos alcaldes que desde la perspectiva de la protección del patrimonio la táctica es ampliar el área Unesco, no constreñirla. Hay gente que dice que eso perjudica la inversión. No. Es dejarle claras las reglas a la inversión. Una cosa es que el plano diga tal cosa y otra lo que indica el buen desarrollo de esos bienes patrimoniales, sobre todo en el caso de Valparaíso, donde la variable paisajística es fundamental. Aquí se revela la falta de plan director, que la ciudad esté planificada sobre la base del patrimonio como variable central, no como una variable más.

-                Según el mismo criterio, Unesco e Icomos también tendrían que pedir evaluación de impacto patrimonial si el borde costero se copara con una muralla de grúas y contenedores o se hiciera un acceso por Cabritería, considerando la tornamesa y la torre Barón.-

Lógico. Sin duda. Esto no es una manía en contra del mall por el rol que cumple; ese es otro tema. En definitiva, cualquier cosa que se haga en esta ciudad que tiene un valor excepcional universal -y eso apela a cuestiones como el mall u obras que están en el entorno del área Unesco- puede afectar el área Unesco. Por ejemplo, tráfico de camiones, de maquinaria pesada, corte de vías, etcétera. Eso puede generar un impacto.- Usted señaló que Valparaíso ya no es la misma ciudad de los años 90, que a partir de 2003 cambió su condición y hoy es patrimonio del mundo. ¿Cree que eso lo han asumido el Gobierno central y las autoridades regionales y locales?

-Yo creo que no completamente. Los hechos están ahí. Una cosa es el discurso y otra son los hechos.-

¿Y piensa que los ciudadanos lo han asumido?-

Es cierto que a nadie se le preguntó si quería ser Patrimonio de la Humanidad. En el proceso de construir un expediente para postular a Sitio del Patrimonio Mundial, que empezó en 1997- 98, hubo mucha preocupación de definir en el plano, de catastrar las casas, lo que era bonito, lo que era feo, pero no recuerdo que haya habido una instancia de participación ciudadana, más allá de invitar a los organismos influyentes, a las universidades, para que cooperaran. Al cumplirse 40 años de la Convención del Patrimonio Mundial, la Unesco ha instalado una agenda muy clara: las comunidades son las depositarias últimas de la soberanía patrimonial y por supuesto el patrimonio es una herramienta fundamental, un agente súper potente del desarrollo económico.

-                ¿Lo es en nuestro caso?-

Llama la atención que sectores que deberían estar mucho más comprometidos con esto no aparezcan tanto. Sernatur, por ejemplo; Fundación Imagen País, Pro Chile, deberían incluir el patrimonio como un tema súper potente en su agenda y tampoco lo tienen. En la conmemoración en México de los 40 años de la Convención el eje fue clarísimo: turismo sostenible de carácter patrimonial. Esa es la gallina de los huevos de oro en México, de manera categórica. ¿Por qué no podría serlo aquí?

-El encargado de Cultura de la Unesco para América Latina y el Caribe, Fernando Brugman, planteó que la protección patrimonial de Valparaíso es responsabilidad de las autoridades locales, pero especialmente del gobierno central.-

Sin duda. La gran contradicción que vemos nosotros es que Chile es un país que está en la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), es decir en el club de los campeones del mundo, pero en estos temas de cultura en general y de patrimonio en particular estamos con un bajo desarrollo.

- El PRDUV termina este año y no está definido qué instrumento financiero se encargará de la protección y mantención del patrimonio ¿Cuál debería ser?

-Una glosa directa del Estado, un fondo permanente. La fórmula para administrarlo tendría que ser mixta, en términos público-privado, pero también gobierno central-gobierno local, porque si se traspasa una cantidad de recursos a un gobierno local que no está adaptado para controlarla y administrarla, va a ser una gestión poco sustentable. Un aspecto central del plan director es la creación de la institucionalidad, de la estructura organizacional que va administrar esto. Pero primero tiene que haber una inversión. No se puede dejar abandonado a Valparaíso como administrador del Sitio echándole esto a sus espaldas sin recursos. Sería un escenario bien insólito.

-                ¿Valparaíso va a aprobar la evaluación de Unesco sobre la protección y mantención de su calidad patrimonial o va a quedar dentro de los Sitios de Patrimonio en Peligro?-

En octubre, en Humberstone y Santa Laura, habrá una reunión propiciada por la Unesco con asistencia de especialistas de todo el mundo, orientada a estudiar una estrategia para sacarlas de la Lista de Patrimonio en Peligro. Los participantes pondrán la atención sobre el sistema en su conjunto, van a pasar revista a nuestra legislación patrimonial y a cómo se ha actuado en otros casos. Y en diciembre, en Santiago, la Cancillería y el CMN organizan un encuentro al que vendrán todos los administradores de los Sitios del Patrimonio Mundial de América Latina a elaborar el informe periódico de estado de conservación. Es como el Mundial de las ciudades patrimonio y va a haber visitas a Valparaíso.

-                ¿Ellos harán un diagnóstico?-

Creo que rápidamente van a tener una visión muy clara, no tanto sobre la evaluación, yo diría que es prematuro usar ese concepto, sino más bien sobre el diagnóstico. Y en la próxima reunión del Comité del Patrimonio Mundial, en julio de 2013, en Camboya, ahí recién se va a ver humo blanco. Y si el estado de las cosas que planteó Icomos en la famosa carta no se ha solucionado, se va a empezar a evaluar qué pasa y ahí sí que le van a tirar las orejas al Gobierno.- Entonces, si Valparaíso pasa a la Lista de Patrimonio en Peligro será responsabilidad del país.- Lógico y sería un fracaso del sistema en su totalidad, en eso también hay que ser bien claro. A nadie le gusta que un sitio entre a la lista de Patrimonio en Peligro, todos quieren que salga. Pero claro, obviamente las dificultades son del país que tiene la responsabilidad de administrar este sitio para todo el mundo.




Por Rosa Zamora, Mercurio de Valparaíso, 9 de septiembre de 2012.





septiembre 05, 2012

"The Cancha"



“THE CANCHA” Una necesaria mirada latinoamericana sobre el Pabellón Chileno en la Bienal de Arquitectura de Venecia



Hace unos días tuvimos oportunidad de visitar y dialogar con los colegas de Chile que hicieron el Pabellón de su país en la 13ª Bienal de Venecia. En principio nos alegró su notoria intencionalidad de proponer una lectura “andina” utilizando la “Cancha” como símbolo de su presencia institucional. Sin embargo, nos extrañó que inmediatamente calificaran la cancha como “Chilean Soilscapes” olvidando que estaban ante un término quechua (no mapuche) y que no solamente abarcaba otros lugares, regiones y países, sino que era propio explícitamente de alguno de esos países.

El catálogo del Pabellón Chileno fue editado exclusivamente en inglés, a diferencia de otros países que recurrieron a su propio idioma con traducciones al italiano y al inglés. Cuando consulté si existía Catálogo en español se me indicó que no, “porqué costaba mucho la traducción”. Esta absurda respuesta –ya que pensamos que los autores escribirían en español y por ende se habría pagado para hacerlo en inglés- nos desconcertó. Con el catálogo en la mano descubrimos que uno de los “Curators” Bernardo Valdés Echenique era nacido en Princeton (USA), la otra “Curator” Pilar Pinchart Saavedra, residía ahora en España y de los autores, Juan Pablo Corvalán era natural de Ginebra (Suiza) y el fotógrafo Cristóbal Palma Domínguez había visto la luz en Oxford (Inglaterra). Es decir, una Legión Extranjera al servicio de la globalización de la Cancha.

El resto de los autores residentes todos en Santiago menos Ivelic que era de Viña del
Mar, ciudades éstas donde es bastante habitual hablar cotidianamente en español. Superada esta curiosa circunstancia de un Catálogo que no estaba destinado a los chilenos y que, a la vez, los representaba de una manera “particularmente relevante” como indicaba la autoridad del Consejo Nacional de Cultura y Artes, la Cancha se nos empezaba a definir ambiguamente como un lugar de confrontación o de una inclusión que, como explica el Catálogo incluía a los animales, árboles y porque no, a la gente, inclusive a los mapuches que no crearon la Cancha.

El Pabellón

Como queriendo refugiarse en la materialidad del suelo, Chile expuso en 1992 en Sevilla un magnífico Pabellón de madera que tenía como atractivo no solamente su excelente arquitectura sino un témpano de hielo que fuera trasladado con esfuerzo y que constituyó un punto de interés notorio. En este nuevo pabellón de la Cancha, los Curadores hicieron una poco exitosa réplica de aquella idea de hace dos décadas para colocar trozos de sal de la cantera de “Tarapacá Salt Flat” como atractivo adicional en un fondo semioscuro del Pabellón.

La intencionalidad “dramática” de la penumbra del espacio que definieron los Curadores refleja notoriamente sus ideas que alimentan el contenido del Pabellón. En esa suerte de dialéctica no se tuvo en cuenta que el término quechua de la Cancha se refiere a un espacio abierto pero, a la vez, contenido, concepto que fuera obviado claramente por quienes utilizaron aquí el término. La propia “cancha” incaica fue utilizada por los españoles en la superposición de la ciudad del Cusco (Perú) para articular las viviendas que la rodeaban formando así el nuevo patio central de las grandes residencias.

Los quechuas, aunque vincularan el término “Cancha” al maíz, jamás se les hubiera ocurrido vincularlo a una andenería de cultivos. Estas incongruencias se verifican rápidamente en la elección de los ejemplos fotografiados que se utilizan en el pabellón chileno donde abundan conjuntos peruanos y de otros países americanos, sin señalar pertinentemente su procedencia (lo que sí se realiza en el catálogo).

Esta apropiación gratuita de Pisaq, Sacsahuamán, Chincheros, Moray o Chan Chan como expresión del “Chilean Soilscapes” es demostrativa de la insuficiencia de las expresiones en su propio espacio territorial, de un tema cuyos Curadores no manejan ni comprenden cabalmente. Se vincula ello a los usos de otros espacios mexicanos o centroamericanos para explicar el “Chilean Soilscapes” o acudir a una presunta cartografía “histórica” donde aparece un Chile “embarazado” proyectado más allá de los Andes. Es evidente que el “Common Ground” que era el lema de la Bienal de Venecia no puede ser integrado por esta manera de entender el “Chilean Soilscapes”.

El pabellón en su realización tiene un interesante “ambiente” espacial, pero el equívoco mensaje se ajusta a una instalación de faroles cuyas pantallas reproducen los temas. Sin embargo, lo estrecho del espacio entre estas lámparas hace muy difícil la posibilidad de rodearlas para ver los contenidos de las pantallas y por ende predomina sobre todo la visión de conjunto frente a la de los contenidos. Sin dudas que en ello, el pabellón gana, a pesar del esfuerzo intelectual de los “Curators”.

El Catálogo “Cancha. Chilean Soilscapes”

El catálogo puede ser visto como una serie de siete artículos de diversos autores que van precedidos por presentaciones oficiales y una nota de los Curadores. De ellos uno se refiere al Desierto, tres a Santiago de Chile (uno de ellos compartido con Puerto Viejo y Castro, única mención al sur chileno), uno a Amereida en la región de Valparaíso, otro a un ciclo histórico de Chile y finalmente uno a “Kancha” de predominio fotográfico. 

Para nosotros es sin dudas, el artículo “Deserta” de Pedro Ignacio Alonso Zúñiga es el que más seriamente trata el tema en el contexto territorial del Desierto de Atacama  en que se articuló la idea del espacio de una presunta “Cancha” sin límites. La nota va acompañada de unas excelentes fotografías aéreas de Ignacio Infante y una visión del ecosistema muy pertinente.

Los trabajos sobre Santiago de Chile, que asumen casi la mitad del relato, se desprenden de la temática canchera para enfocarse en los temas que interesan promover. Así Alejandro Aravena en su firma “Elemental” nos propone un “Metropolitan Promenade” cuyo mapeo contrasta con la cartografía del “Real Estate” de su colega Cuadros Ibañez.
Apuntando hacia la necesidad de un espacio urbano calificado en Santiago, donde solo reconoce como tal el Cerro San Cristóbal receptor, según Aravena, de cinco millones de visitantes anuales, propone encarar allí el Metropolitan Promenade. El Catálogo no define quien habría de realizarlo, pero la respuesta es casi elemental. Una forma de promover  iniciativas privadas desde la gestión pública.

En la misma línea, el “Play Ground” de Genaro Cuadros nos advierte del éxito del neoliberalismo que termina degradado por los proyectos urbanos fallidos. Queda a cargo del lector adivinar los responsables de tan dramática situación cuando las ideas eran tan buenas. Con sus gráficos y cuadros, Cuadros Ibañez nos demuestra que la exitosa tarea del  “Dictatorship A. Pinochet” es que recién en 1990 (cuando está en retirada) logra realizar similar cantidad de viviendas que las que había hecho Salvador Allende en 1971. Para referirnos nada más que a lo cuantitativo las cifras de aquel maravilloso neoliberalismo fueron siempre superadas por los gobiernos siguientes de la Concertación.

El autor nos muestra en su visión para promover atractivas inversiones, un mapeo del “Stratum” socioeconómico de Santiago de Chile. Allí se puede percibir que el área urbana que ocupa la “clase alta” triplica la extensión territorial de la que dispone la “clase baja”, se obvia además hablar de densidades o de población cuantitativa. A la vez se insiste en la exitosa rentabilidad que tiene la inversión en vivienda, una engañosa referencia que no atiende a dar respuesta a las necesidades de vivienda social ya que en general generan escasa o nula rentabilidad. Se omite aclarar que justamente los sectores más carenciados de vivienda están fuera del “mercado” y que su problema no se resolverá sin adecuadas políticas muy alejadas del exitoso neoliberalismo que  promueve el autor.

El otro texto que toma parcialmente Santiago de Chile y en particular la Plaza Italia es el de Rodrigo Tisi “Perfomances of conquest”, donde a través de fotografías bastante intrascendentes muestra como los ciudadanos se fotografían en ese espacio abierto como lugar de confluencia. Son intrascendentes pues se trata de fotografías de pose, sin actividades concretas sino de referencia de presencia en un sitio significado por la vigencia de monumentos variados. El caso de Puerto Viejo, un asentamiento pesquero se trata de una “toma” de pobladores para una segunda casa de vacaciones, (algo similar al Cabo Polonio de Uruguay) avanzando sobre la costa en un área de peligro por maremotos. La justicia chilena no aprobó la ocupación, ni el derecho de localización por más de 20 años de los habitantes estando en trámite de desalojo. El tercer caso se refiere a la construcción de un Mall en Castro, capital de Chiloé, un área considerada de relevante patrimonio mundial por la UNESCO. El “Castro Shopping Mall” fue un lamentable proyecto de un estudio de arquitectos argentinos que ha impactado atrozmente en el contexto patrimonial de Castro y motivó un conflicto de intereses donde el Municipio se demostró ausente para hacer respetar sus propias Ordenanzas y cómplice de los intereses especulativos de los proyectistas, empresarios y ansiosos consumidores locales.

En la lectura histórica de Juan Pablo Corvalán (Susuka) creemos que su presentación ofrece con bastante honestidad el mensaje que el texto de “Cancha” pretendía. De entrada nomás se pregunta “¿Podemos pensar en un Chile sin límites?” inquiriendo su papel potencial en la globalización y definiendo un rol protagónico a nivel continental capaz de exportar “ideas frescas”. Apoyándose en los estudios del geógrafo francés Claude Gay (1844-48) y con la calidad de unos dibujos y fotomontajes articula estadios cronológicos de Chile. Así aparecen una gama de cartografías imaginarias con varios Chiles posibles que avanzan hacia latitudes de otros países vecinos o que en el imaginario fantasioso del autor llevan el Desierto de Atacama hasta el límite de Ecuador y Colombia. No se trata tanto de una fantasía ingenua del dibujante sino una expresión puntual de ese Chile sin límites que propugnaba.

El discurso es coincidente con los anteriores cuando nos recuerda que es justamente la economía de libre mercado la que elogia el crecimiento de Chile y que bajo una fuente insospechada e inimputable como la Agencia Standard Poor´s (recordar las opiniones de las Agencias sobre Lehman Brothers antes de la crisis) ubica al país como “leading position” dentro de América Latina en categoría A+. La historia en definitiva, ha logrado colocar en un puesto de alta relevancia a Chile en el “Global Competiveness Index”. La relación con la presunta Cancha local todavía no aparece clara.

Le corresponderá al arquitecto Germán del Sol, realizador de obras de singular interés abordar el tema que unifique aquel primer texto del desierto con el espíritu de la “Kancha”. Con unas pocas líneas y unas bellas fotografías del propio autor y de Guy Wenborne parece que bastaría para exponer la teoría de una cabalgata fotográfica que va desde el Juego de Pelota en Monte Albán (México), hasta alguna obra de arquitectura del autor radicada en Chile. En medio de ello, el uso y abuso de lugares prehispánicos del Perú, demuestran lo inocuo de un mensaje propiamente chileno y el error de no haber tomado el tema con la adecuada escala americana, no solamente en las fotos sino también en los conceptos.

En esto es posible rescatar el histórico trabajo de la Universidad Católica de Valparaíso a través de Amereida que desarrolla Iván Ivelic. Un poema que en 1967 recoge el argentino Godofredo Iommi percibiendo el continente americano como un mito épico que es necesario volver a integrar territorialmente. El espacio continental constituye el territorio vinculado por las Travesías, la primera de las cuales en 1965 cruzará por Chile, Argentina y Bolivia, dando pie a un mecanismo de diálogos culturales y vivencias compartidas. Otro argentino, el escultor Claudio Girola, marca con su obra sobre las Travesías el hito identificatorio de esa actividad itinerante.

La construcción en Ritoque de “Ciudad abierta” (aunque de acceso privado) en los años 70 marcó el punto de referencia de las Travesías y el espacio de las convivencias que devinieron en la radicación de profesores e integrantes del proyecto en un largo proceso de construcción de un espacio reconocible como aval de aquellas ideas de arte y diseño. No encontraremos, sin embargo, en el extenso trabajo de Ivelic una sola mención a la palabra “Cancha” que hubiera podido integrar el texto a la temática que teóricamente planteaban los Curadores.

En concreto casi ninguno de los autores recurre a la palabra “Cancha” en sus textos, ni utiliza su contenido conceptual correcto. Nos presenta un Chile parcial de centro a norte que pretende promover espacios de inversión en Santiago y que recurre a la metáfora prehispánica para anclarse en una presunta historia territorial cuya vigencia hoy solo se demuestra por ejemplos externos al propio territorio chileno. El uso indebido de ellos muestra la ausencia del sentimiento latinoamericano de quienes –los Curadores en primer lugar- se han hecho responsables de este Catálogo y Pabellón. Esperamos que no sea expresión de ese vago sentimiento que ejercitan algunos chilenos de que estamos ante “los ingleses de Sudamérica”·

En Chile los americanos perdimos la batalla de Cancha Rayada en la guerra de la independencia, hoy sentimos que nos rayan la cancha para definir unas ideas que solamente se pueden entender en inglés, como el Catálogo y el Pabellón.  Seguimos queriendo al Chile y a los chilenos latinoamericanos.



Arq. Ramón Gutiérrez
CEDODAL, Buenos Aires